martes, 11 de septiembre de 2012

Niños y actividad física

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la actividad física en niños de 5 a 17 tiene gran cantidad de ventajas para su salud y crecimiento.  Contribuye a desarrollar un aparato locomotor y un sistema cardiovascular sanos, ayuda al control neuromuscular y a mantener un peso corporal saludable. Además, tiene efectos psicológicos beneficiosos como el control de la ansiedad y la depresión.
La actividad física para los niños y jóvenes de este grupo de edad se realiza principalmente a través de juegos, deportes, desplazamientos, actividades recreativas, educación física o ejercicios programados. Las diferentes actividades se desarrollan en el contexto de la escuela, la familia o la comunidad.
Otra de las ventajas que ofrece la práctica de este tipo de hábitos saludables es la contribución al desarrollo social de los jóvenes, puesto que fomenta la autoconfianza, la interacción social, la integración y su capacidad para expresarse.
Las recomendaciones de la OMS es que estos niños inviertan un mínimo de 60 minutos diarios en la actividad física, siendo mayores los beneficios si se aumenta el tiempo. La actividad debe ser en su mayor parte aeróbica e intercalarse con prácticas que refuercen, en particular, músculos y huesos.
Los jóvenes activos tienen mayores oportunidades de adoptar otros comportamientos saludables como evitar el consumo de alcohol, tabaco y drogas, y suelen tener un mejor rendimiento escolar.