Investigadores de la Universidad
Miguel Henández de Elche, en colaboración con el Hospital del Vinalopó, han
desarrollado un programa de actividad física para mejorar la calidad de vida de
pacientes intervenidos en una operación de reducción de estómago.
En el estudio han participado 20
pacientes entre los 31 y los 60 años. Se trata de un trabajo centrado en dos
líneas de investigación, por un lado el entrenamiento físico y por otro las
técnicas de motivación al deporte. Durante los seis primeros meses los
resultados han determinado un promedio de 17,65 kg de pérdida de peso, además
de un aumento del consumo máximo de oxígeno y una mayor intención de practicar
actividad física.
El estudio se realiza a través de
una técnica que consiste en dividir a los pacientes en dos grupos de trabajo.
El primero de ellos es experimental y en él se somete a los participantes a un
programa de actividad física dividido en varias sesiones de entrenamiento, bajo
las directrices de los investigadores de la universidad. El otro grupo sigue
los ejercicios recomendados por el equipo médico del hospital sin supervisión.
El objetivo es comparar la
evolución de los dos grupos y las mejoras que se producen. Además, pretende
trasmitir a los pacientes las ventajas de realizar ejercicio físico de forma
regular y motivarlos a que continúen realizándolo una vez finalizado el
programa.